domingo, 13 de febrero de 2011

Gañán

Gañán

Mozo de labranza. Hombre fuerte y rudo.
Los labradores acomodados tenían criados, que se encargaban de hacer las aradas. Había dos estilos de arar: el gañán fino sacaba pocos terrones y dejaba los cerros rectos y apurados, con perfecta geometría. El gañán fuerte, en cambio, metía la reja profunda, sacaba muchos terrones y dejaba la tierra revuelta y bien preparada.

¿Qué sabéis de este oficio en Motril? ¿Quien aporta fotos, datos, documentos, etc sobre los gañanes motrileños?


























GAÑÁN, EL OFICIO DE MI PADRE. Por Gloria

El oficio de mí padre era, el de gañán de bueyes. Lo fue desde muy joven. Siempre lo vi rodeado de sus animales y sus instrumentos agrícolas. De esto hace, muchísimos años. (Que recuerde 50 y muchos).

Era propietario de su propia yunta. Con ella trabajaba sus tierras y las de otros muchos agricultores, que en aquellos tiempos había por esta zona, (que eran bastantes, por ser tierras de muchos). Y no todos podían tenerla.

Araba las tierras de los demás y siempre le pagaban en metálico. Casi siempre después de la recogida de sus frutos.

El tenía un cuadernillo, donde iba apuntando: Los margales trabajados. La forma del trabajo realizado: arado, agrado, asurque. Y el día, el mes, el año. Esto era, porque algunos de ellos tardaban años en pagarle. Bien porque sus cosechas no habían sido buenas, o simplemente, porque sus precios habían sido demasiados bajos.

Las yuntas podían formarse, por dos bueyes, dos vacas, o, mixtas. Pero las más frecuentes, eran las mixtas, porque eran las mejores para estos terrenos.

Estos animales eran especialmente adiestrados para estos menesteres. No todos servían para ello. Los cuales tenían nombres propios, Rubia, Golondrina, Tramposo...

Había gañanes que apostaban por sus yuntas. Aquí se miraba: la fuerza, la obediencia y la nobleza de los animales en el trabajo. Por esta zona hubo muy buenas yuntas. Teniendo reconocida fama, por los demás gañanes, en toda la comarca.

Cuando se preparaban los animales, para el trabajo, se hacía como si fuera un ritual: Se les ponía el yugo en sus cabezas y se les sujetaban a ellas, por cuerdas, quedando unidos entre sí por el yugo. Esto se le llamaba uncido, y era todo un arte. Sí se hacía bien, los animales trabajaban mejor, facilitando el trabajo al propio gañán. Desde el uncido salían dos cuerdas que llegaban hasta el gañán, desde donde él, les transmitía las condenes: hacia la izquierda, derecha, parar...
Los aperos, para el trabajo los formaban, una grada, dos arados y un eje. Por un extremo del eje se le enganchaba determinado instrumento y por el otro, iba enganchado al yugo.

Uno de los arados (1º) servía para remover la tierra, haciendo surcos sobre ella. A continuación entraba la grada. (Instrumento de madera con numerosas cuchillas, en formas de ganchos), removiendo la tierra con las cuchillas, allanándola y liberándola de hierbas y piedras. Por último entraba el arado (2º) haciendo surcos en ella, preparando así la tierra para poner el fruto.

Figura 1º
Figura 2º

El trabajo de los gañanes, era de temporada. En el año había tan solo unos meses, en el que se preparaba la tierra para sembrar el cultivo. Después se tiraban otros tantos sin trabajar. Hasta la recogida, del nuevo fruto.

A mí padre jamás le vi, sin trabajar, trabajaba de sol a sol. Cuando no lo hacía en nuestra tierra, lo hacía en las tierras de los demás.

Volvía siempre de su trabajo, entre dos luces. La mayoría de las veces, le esperaba a la orilla del camino. Allí aparecía a lo lejos, con la yunta suelta. Andando, con su llamadera al hombro y su talega en la mano. En ella me solía traer, hiervas, plantas y algún que otro insecto, que yo aun no conocía. Me besaba, me cogía de la mano y, me llevaba para casa.

De este modo se le fue pasando la vida... Se le pasó.

Gloria.

4 comentarios:

angel dijo...

¡Magnífico trabajo el que te acaba de proporcionar "Gloria"!(¿Podríamos saber quién es "Gloria", por aquello de otorgarle a las personas el reconocimiento que requiere una obra bien hecha?).
Además de presentar una estructura literaria muy acertada y bien llevada, nos ha detallado con primor todos los pormenores de este trabajo tan "nuestro", tan de nuestra niñez.
Mi felicitación para ella y para el titular del Blog, por contar con tan atinados colaboradores.
¡Temas como este, te recrean tus vivencias y son muy de agradecer!

Manuel dijo...

De joven fuí gañan de mulos, uno gallego y pequeño, otro romo de color castaño, el tabajo, era arar para sembrar los cereales, mayormente en los meses de invierno, y en verano abarcinar las mieles y trillarlas,era un trajo duro y poco compensado, pero había que hacer de todo para poder comer
Un saludo Manuel Escañuela

jose dijo...

Creo que en el comentario de Gloria queda reflejado con claridad lo que era un gañan,no teniendo que ser criado ni mozo de nadie,mas bién eran lo que hoy se llama emprersario aútonomo,todavia quedan que yó sepa sobre cinco en Motril

Anónimo dijo...

Gracias por tú comentario Ángel. Comentarios como el tuyo hacen, que aficiones que están prácticamente dormidas, despierten.
De nuevo, muchísimas gracias.
(Gracias Antonio).
Gloria.